¿Sagitario? No, tú eres “gente que escucha a Natalia Lafourcade cuando llueve”.
¿Sagitario? No, tú eres “gente que escucha a Natalia Lafourcade cuando llueve”.
¿Sagitario? No, tú eres “gente
que escucha a Natalia Lafourcade cuando llueve”.
A ver, seamos honestos. El
horóscopo puede decir mucho de ti: que si eres impulsiva, que si lloras con
comerciales o que necesitas dejar ir. Pero si de verdad quieres conocer a
alguien, mejor échale un ojo a su playlist. La música que escuchamos es
como una carta astral pero con más flow, más drama y menos planetas
retrógrados.
Hoy venimos a hacer un
análisis completamente no científico, pero absolutamente real, sobre lo que
revela tu gusto musical. Prepárate para sentirte expuesta.
Si escuchas a Mon Laferte,
Silvana Estrada o Natalia Lafourcade...
Eres una persona emocionalmente profunda. Tienes una playlist para cada tipo de llanto: llorar bonito, llorar feo, llorar en la regadera. Te sabes los acordes de ukelele aunque no tengas uno. Eres la del “me enamoro una vez cada 4 años, pero cuando lo hago, entrego el alma”. Tu frase típica: “No estoy triste, solo estoy sintiendo”.
Si traes a Bad Bunny, Rauw
Alejandro o Karol G en rotación...
Eres fuego puro. De día trabajas como si nada, pero de noche te transformas. Tienes un alter ego para salir y sabes que el perreo también es terapia. Usas frases de canciones como indirectas (o amenazas). Tu energía es “yo solita puedo con todo, pero si quiero, también puedo contigo”.
Si tu corazón le pertenece a
Zoé, Café Tacvba o El Mató a un Policía Motorizado…
Eres indie con corazón de estudiante de filosofía. La música es tu filtro de Instagram. Escuchas bandas que casi nadie conoce (aunque tienen 20 años de carrera). Si te pierdes en una fiesta, seguramente estás en la azotea hablando de existencialismo con alguien que huele a incienso. Tu look: tote bag y algún accesorio vintage que antes fue de tu abuelita.
Si eres de los que siguen
escuchando RBD, Kudai o Belanova...
Eres puro corazón nostálgico. No necesitas terapia, necesitas un regreso oficial de tu banda favorita. Tienes carpetas con letras escritas a mano, y todavía usas emoticones como :’) o xD sin ironía. No niegas tu pasado, lo celebras con glitter y coreografía. Cuando suena “Sálvame”, se te activa la memoria emocional.
Si tienes a Residente, Calle
13 o Jorge Drexler en tus favoritos...
Tú no solo escuchas música, tú la analizas. Eres de los que buscan la letra en Genius mientras la canción suena. Eres el amigo que siempre tiene una recomendación musical que “te va a volar la cabeza”. A veces das discursos sin querer. Lo tuyo no es solo gusto, es convicción.
Si estás obsesionada con BTS,
Rosalía o Young Miko...
Eres main character energy. Tienes un fandom, una comunidad, un estilo y un manifiesto personal. Eres pasión pura. Cuando te gusta un artista, estudias su historia como si fuera tesis. Lloras con los logros de tus faves y los defiendes como si fueran de tu familia. También sabes hacer edits con música y clips random que inexplicablemente hacen llorar a todos.
Si lo tuyo es José José,
Emmanuel, Armando Manzanero o Rocío Dúrcal...
Eres elegancia emocional en su máxima expresión. Eres la persona que pone la playlist en la reunión familiar y todo mundo dice “esa sí es música”. Te sabes los silencios de “El Triste” y cantas con el alma, aunque no estés pasando por una tragedia amorosa (o tal vez sí, quién sabe). Tienes un corazón antiguo, romántico, y crees que las canciones ya no se escriben como antes. Tu frase favorita: “Esto sí era música, no como lo que oyen ahora”, aunque luego te vean bailando reguetón a escondidas.
Si tu playlist es un
revoltijo de todo lo anterior…
Eres el caos hermoso. No te
defines por un solo género, sino por momentos. Puedes pasar de la salsa más
bailable a una balada que corta el alma en segundos. Eres impredecible,
emocional y versátil. La gente nunca sabe si vas a proponer una fiesta o una noche
de llorar viendo pelis. Y tú tampoco, la neta.
Puede que tu signo diga que
eres “creativa, intensa y sensible con ascendente en drama”, pero tu playlist
revela cómo lo expresas. La música nos delata: nos acompaña, nos refleja y nos
delata más que cualquier carta astral.
Así que, la próxima vez que
quieras conocer a alguien, no le preguntes su signo. Mejor dile: “¿Cuál fue la
última canción que pusiste en loop?”
Spoiler: eso dice TODO.
AUTOR: Redacción Top Radio
